Prada cierra ejercicio creciendo un +8 por ciento sobre sus valores prepandemia

Escasas horas después de haber revolucionado la Semana de la Moda masculina de Milán con la presentación de la última colección de su buque insignia, la firma de modas Prada, para la próxima temporada Otoño/Invierno de 2022/2023, el Grupo italiano homónimo ofrecía una última actualización financiera sobre sus cuentas relativas a su último ejercicio completo de 2021. Periodo anual que finalizaba el pasado 31 de diciembre de 2021, durante el cual, a la vista de los datos preliminares que manejan desde la dirección del Grupo, la multinacional italiana habría logrado holgadamente, ya no solo disparar su facturación sobre sus cifras del anterior año de 2020, sino igualmente superar sus valores de facturación del ejercicio de 2019 previo a la pandemia. Una tendencia que ya comenzó a reflejar sobre sus cuentas durante la segunda mitad del ejercicio de 2020.

Poniendo valor a estas estimaciones, desde el Grupo italiano adelantan que la compañía habría cerrado el ejercicio de 2021 con una facturación total por valor de unos 3.364 millones de euros. Cifra que representaría un incremento del +41 por ciento sobre la facturación registrada al cierre del ejercicio de 2020, así como un aumento del +8 por ciento sobre los ingresos totales del Grupo recogidos durante ese ejercicio de 2019 previo a la pandemia por coronavirus. Una clara mejoría en términos de facturación, que habría llegado impulsada, en línea con las estrategias del Grupo de reducir su exposición en el canal mayorista, por el buen comportamiento experimentado por la multinacional en el canal minorista.

“2021 fue un año lleno de desafíos, pero demostramos estar listos y supimos responder rápidamente a las necesidades de un mercado extremadamente dinámico, poniendo en marcha acciones que nos permitieron entender los cambios en el comportamiento de los consumidores de una manera efectiva”, se encargaba de remarcar Patrizio Bertelli, director ejecutivo del Grupo Prada, a través de unas declaraciones difundidas desde la propia multinacional de la moda. “El Grupo Prada”, apostillaba el directivo, “tiene las capacidades y los recursos para diferenciarse y cumplir con sus futuros objetivos de crecimiento”.

Cerrando en positivo, con un “sólido superávit” en términos de beneficios

Partiendo de estos datos, que tal y como apuntan desde la compañía italiana podrían terminar reflejando ligeras variaciones una vez que se proceda a profundizar en estas primeras cifras preliminares, con el fin de poder elaborar las cuentas anuales de la compañía, por canales, las ventas directas al consumidor del Grupo (DOS), incluyendo el canal online, mostraron un extraordinario comportamiento durante la segunda mitad del ejercicio. Periodo en el que llegaron a reflejar un aumento del +27 por ciento frente a los datos de 2020, así como del +21 por ciento frente a los de 2019.

Al tiempo que, como apuntábamos, la compañía continuó tratando de reducir su exposición en el canal mayorista, las cifras de ingresos han llevado a la multinacional a reflejar un crecimiento de su EBIT “significativo”, sin que no obstante se hayan decidido a adelantar el valor aproximado con el que el indicador ha llegado a cerrar el ejercicio de 2021. Un periodo en el cual se ha generado un importante flujo de efectivo, que ha llevado al Grupo ha cerrar sus cuentas anuales con un “sólido superávit” financiero en términos de beneficio neto.

Integrado por las marcas de moda Prada y Miu Miu, así como por las de calzados y complementos Church’s y Car Shoe y por la histórica pastelería milanesa Pasticceria Marchesi, el Grupo Prada ocupa actualmente una de las principales y más sólidas posiciones como compañía líder dentro del sector de la moda-lujo. Un papel que tratan de defender, a día de hoy, Miuccia Prada y Raf Simons desde las posiciones de codirectores creativos de Prada, y Patrizio Bertelli como director ejecutivo de la multinacional. Compañía encargada del diseño, la fabricación y comercialización de sus distintas colecciones de prêt-à-porter, marroquinería y calzado, a través de una red compuesta por 23 fábricas y 635 tiendas repartidas por más de 70 países del mundo. Estructuras a las que se suman sus distintos acuerdos en los canales mayorista, minorista y e-commerce, con diferentes compañías, tiendas multimarca y grandes almacenes de las distintas partes del mundo, para la comercialización de unas colecciones propias, a las que hay que añadir aquellas realizadas bajo acuerdos de licencia para los campos del sector óptico y de la perfumería.