Llaman a controlar el consumo en la moda
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Diseñadores y textiles coinciden en la necesidad de un cambio de mentalidad hacia un modelo menos consumista para consolidar la moda ética y una producción sostenibles. A esta conclusión llegaron los expertos en Barcelona en actividades
previas al Feria Internacional de la Maquinaria y la Tecnología Textil (ITMA).“El
“Debemos cambiar la mentalidad de cantidad a calidad”, agregó el experto tras animar a los representantes de grandes cadenas textiles presentes en la conferencia a que usen su influencia. En este sentido denunció a las compañías que hacen un “green washing” una especie de lavado de cara temporal para quedar bien con el consumidor sin comprometerse con un cambio de estructura aunque sea gradual.
También llamó a aprovechar la tendencia creciente a favor de una moda sostenible. “Este es un mercado creciente, y hay que aprovecharlo (…) Trabajen con los códigos de la cultura del negocio, no en contra de ella”, sólo así se los tomarán en serio, añadió Cook.
Para el experto, se trata se lograr un esquema de desarrollo económico (no crecimiento) que ayude a las personas a conseguir una vida más plena.
En el mismo sentido se pronunciaron unos días antes representantes de la moda en la mesa redonda Africanidad: Moda Etica en la tienda Gratacós de Barcelona. “Hay que educar al público para que se cuestione quién paga la diferencia cuando compra una camisa a 10 euros, si es un niño que trabaja o una tintorería que no limpia el agua”, dijo el diseñador catalán Josep Abril tras acotar que una camisa, sólo en la confección, cuesta por encima de los 20 euros.
Albert Salas, el coordinador de la campaña Clean Clothes comentó que muchas personas que trabajan en la confección lo hacen casi en esclavitud con salarios que no pasan de los 200 euros. “Después nos preguntamos por qué tenemos niñas de 13 y 14 años trabajando en talleres para grandes marcas en Bangladesh o en Marruecos”, explicó.
Aunque también reconoció que cada vez más son las firmas que apuestan claramente por otra forma de producir más estructural que no sea solamente “lanzar una colección de camisetas con algodón orgánico”.
“Llevamos muchos años comprando en forma compulsiva”, dijo por su parte la coolhunter Ursula Uria de la Agencia Nelly Rodi. Adelantó que, también como consecuencia de la crisis económica, la gente va a volver a desear, a soñar con tener algo y ahorrar para ello, y esto ayudará a que las marcas apuesten más por la calidad”, añadió.
Foto: Campaña mundial por una moda ética